El Gobierno boliviano está lidiando con una supuesta escasez de dólares y una creciente sensación de temor en la población.
Richter, ha explicado que la especulación es una de las principales causas de este problema, con algunas personas llevando dólares a países vecinos para comprar productos a menor precio y luego internándolos a Bolivia para obtener ganancias. También hay una mayor demanda de dólares en el país debido a los discursos que buscan desestabilizar la economía.
Para solucionar este problema, el presidente Luis Arce ha propuesto una ley de compra de oro para aumentar las reservas internacionales y garantizar el flujo de dólares. Richter está de acuerdo con esta propuesta y cree que Bolivia debe acumular una mayor cantidad de oro para poder ser monetizado cuando sea necesario. El Banco Central de Bolivia también está vendiendo la moneda directamente mediante fichas y programaciones para reducir la especulación y el agio.