El presidente de Bolivia, Luis Arce, ha sido proclamado candidato presidencial para las elecciones de 2025, a pesar de tener solo un 1% de intención de voto, según las encuestas.
La oposición ha criticado duramente esta decisión, acusando al gobierno de manipular el proceso electoral y de utilizar recursos públicos para su campaña. El diputado Alejandro Reyes denunció que el MAS está utilizando medios públicos y documentos para reescribir la historia reciente y justificar su permanencia en el poder.
Arce ha rechazado estas acusaciones, asegurando que el pueblo está organizado y consciente, y llamando a la unidad y el compromiso de sus seguidores. Sin embargo, la oposición advierte que el MAS podría intentar manipular el proceso electoral para asegurar su permanencia.