Bolivia enfrenta una compleja CRISIS ECONÓMICA, con un crecimiento proyectado del 1.6% para 2024, según el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La escasez de DÓLARES y el DESABASTECIMIENTO de combustibles han paralizado o ralentizado actividades económicas.
La INFLACIÓN acumulada es de 8.8%, la más alta en 16 años.
El modelo económico actual muestra signos de agotamiento, con reservas del Banco Central en 1.900 millones de dólares y una deuda externa de 13.500 millones de dólares.
Analistas sugieren ajustes fiscales, reducción de subsidios y cooperación internacional para estabilizar la economía.