La jueza boliviana Lilian Moreno, quien anuló la orden de captura contra el ex presidente Evo Morales, fue detenida en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra por orden del fiscal Fernando Espinoza.
Su defensa afirmó que Moreno fue aprehendida sin evidencia convincente, y Carmiña Aguilera, prima de la jueza, reveló que Moreno había recibido amenazas en su domicilio desde que emitió el fallo en octubre.
La decisión de Moreno había sido revertida por un juez de La Paz, y ahora ella enfrenta investigaciones disciplinarias y procesos por prevaricato y desobediencia a resoluciones constitucionales.
El Consejo de la Magistratura de Bolivia inició una investigación disciplinaria para determinar si la actuación de Moreno se ajustó a la normativa vigente.
La detención de Moreno ha generado críticas sobre posible persecución política.